Sin desesperación, es cierto que las cuentas corren y generar suficiente dinero para saldarlas siempre es urgente, pero el emprendimiento suele ser a menudo una carrera de paciencia que usualmente consiste en la prueba y el error. Quizá suene ingenuo y optimista, pero el emprendimiento se trata de no cansarse de intentarlo una y otra vez, si es necesario, a partir de cero.
“Desde cero” es sólo un dicho, pero la realidad es que cada ocasión que reiniciamos un proyecto que eventualmente no dio los resultados que buscábamos, estamos haciéndolo con un conocimiento extra que antes no teníamos. El emprendimiento consiste en muchos casos, en aprender a obtener beneficios hasta de las “malas experiencias”.
Y la capacidad de reiniciarse aplica para todos los sectores. Piensa en el Marketing Digital, como una herramienta que tan sólo hace 10 años no estaba al alcance de la mayoría de pymes y empresas que conocemos. Es sorprendente enterarnos de la cantidad de grandes marcas y empresas que fueron barridas de la faz hace tan sólo unos años, solamente por no saber adaptarse a la revolución digital que nos empapó a todos. ¿Te suena Kodak?
Actualmente es casi impensable que exista una gran marca que no se encuentre respaldada por un ecosistema digital robusto y bien distribuido en la red. Pero incluso ellas, con los millones de dólares que destinan anualmente a fortalecer su presencia digital, pueden ser víctimas de errores que en otros casos podríamos atribuir a la inexperiencia de una Pyme. La moraleja es que “las grandes agencias y “gurús” digitales, a menudo no son lo que dicen ser. ¿Te suena Carlos Master Muñoz?
En contraste, hoy en día pocos son los negocios pequeños y medianos, que no gozan de su respectiva presencia en cualquiera de las plataformas digitales que actualmente dominan el mercado, desde Google hasta Instagram o Linkedin, y que incluso cuentan con su propio sitio web, desarrollado de manera independiente. ¿A qué crees que se deba?
Necesidad, la madre del emprendimiento.
Claro que este artículo no se trata de grandes empresas o marcas que tienen todos los recursos para derrochar en estrategias de marketing que pudieran o no funcionar. Para casi cualquier Pyme, invertir dinero, es cosa vital, así que no hay un gran margen para el error y la pérdida. Y es a partir de la necesidad apremiante, que las soluciones digitales cobran un papel revolucionario para cualquier emprendimiento. Ya no es hace diez años, hoy cualquier negocio puede crear su propia estrategia de posicionamiento digital y comenzar desde cero una y otra vez hasta dar en el clavo.
No hay lugar para el derroche, pero tu estrategia de marketing puede tener los brazos y alcance que tú decidas que tenga. Piensa en esto: Todas las plataformas digitales sin excepción, están diseñadas para fomentar vender y comprar. Así que, tu principal brújula tendrá que ser, reconocer dónde se encuentran los clientes que necesitan de ti.
Todo plan de marketing digital comienza con una base, y en esta base se encuentran las respuestas que te ayudarán a dar en el clavo. ¿Qué es lo que debe tener el plan de marketing digital de tu negocio? La respuesta es una sola: Tu necesidad y las herramientas que utilizarás para satisfacerla.
No vayamos al lado del falso emprendedurismo, no estoy hablando de conseguir metas irreales en tiempos récords. El marketing digital real, requiere de tiempo, pasos que podrían parecerte lentos pero que tienen el objetivo de ser reales y seguros.
¿Quieres hablar más acerca del plan de marketing de tu Pyme?